domingo, 6 de enero de 2013

Plaza de armas- Cusco




Aguas calientes

El tren salio puntual, todos estábamos acomodados y ansiosos por ver que nos mostraría el paisaje. Una voz por parlantes nos dio la bienvenida y comenzó todo. La música daba un clima especial y único, estábamos viajando entre las montañas y el cielo azul que se podia visualizar desde el techo despejado del tren. En el camino veíamos a algunos viajeros que realizaban el camino del inca y saludaban al tren, algunas personas que viven por pueblitos cercanos, y las montañas, el color verde intenso, contrastando con el cielo y debajo, el rió, todo parecía pintado como en un cuadro, perfecto. Llegamos a la estación de aguas calientes, y se largo a llover torrencialmente, una señora nos esperaba con un cartelito con nuestros nombres, la seguimos,corriendo, tambien ya acostumbrados a salir y mojarnos, no nos olvidemos que es epoca de lluvias en peru y bolivia. El hotel, chiquito, muy lindo y familiar. Nos quedamos descansando mientras veiamos television peruana y al ver que la lluvia no paraba ni un poco, decidimos salir igualmente a pasear. Aguas calientes, tiene lo justo y necesario para dejar conforme a cualquier turista, el rio divide la zona de los restaurantes y bares de la parte en la que hay una gran feria de artesanias y todos los hoteles. Algo de lo que aprendimos en Bolivia y Peru (principalmente Lucas) es que la compra tiene que ir de la mano del regateo, los vendedores se aprovechaban mas aumentando los precios pensando que eramos gringos hasta que nos escuchaban hablar y se apiadaban un poco de nuestro bolsillo. En la feria de Aguas calientes vimos las cosas mas lindas para comprar, luego del otro lado del rio nos bombardearon la gente encargada de invitarte a pasar a comer a su restaurante, variedad de precios y en la mayoria menues de 20 a 25 soles por tres platos abundantes, igual esa noche estabamos antojadisimos a cenar pizza al horno de barro, asi que despues de dar mil vueltas por los mismos lugares, elegimos un lugar en el que terminamos comiendo muy bien. (A continuacion la foto). Aguas Calientes es un pueblito maravilloso, de noche , cruzar el puente y escuchar solo el ruido del rio, las montañas imponentes alrededor, cada rincon, cada momento, lo que llegaria al dia siguiente iba a ser mas impactante, pero ese pueblo tuvo un encanto tan especial que seria un buen lugar para terminar mis dias.

Viaje en tren hacia una ciudad llena de magia